No es cuestión de genios y deseos cumplidos pero la Transformación Digital se ha acelerado, en gran parte gracias a la reciente pandemia. Como clientes, nos han empujado a consumir a través de aplicaciones, comprar en línea y utilizar servicios digitales. Como empresas, el desafío fue encontrar nuevas formas de operar de forma remota y reconectarnos con los clientes digitalmente, y esto solo fue posible adoptando las tecnologías para hacerlo todo de manera eficiente.
Todos se han visto afectados, desde los concesionarios de automóviles que se mudaron en línea para apoyar el servicio y las ventas, o las tiendas de comestibles familiares que cambiaron a pedidos anticipados y retiros móviles, hasta fabricantes y empresas de bienes de consumo empaquetados que administran el abastecimiento dinámico. Ante ello, la necesidad de actuar rápidamente ha impulsado soluciones creativas a corto plazo.
Todo esto requirió un gran esfuerzo que aún no termina: se trata de un viaje sin retorno que, si lo sabemos aprovechar, no solo nos mantendrá vigentes, también puede hacernos diferentes y volvernos disruptores del mercado. Se trata de considerar las oportunidades y salir lo mejor librado de cada coyuntura.
Observemos el caso de los médicos, que ahora atienden de manera digital a una parte de sus pacientes, y los que no lo hicieron así, quedaron relegados o expuestos. Pero también existen casos como el de Nike, que se embarcó en un viaje de Transformación Digital de dos años y con ello mejoró su análisis de datos y la experiencia del cliente, lo cual trajo como consecuencia que los precios de las acciones mejoraran un 69% dos años después de su transformación1.
Otro caso muy sonado es el de Domino’s Pizza, marca que puede presumir de que, en solo tres años, sus acciones se han revalorizado un 500%. Probablemente sea gracias a esta búsqueda de la perfección, tomando en consideración las recomendaciones de clientes y empleados, unido a la adaptación digital que han realizado y ahora los pedidos se pueden realizar desde cualquier dispositivo: smartphone, smart TV, smartwatch… Tanto es así que la mitad de sus requerimientos son online.
La Transformación Digital, si se realiza correctamente, requiere alineación en todo el negocio, incluidas las inversiones, prioridades, métricas y ejecución. Puede que todo eso suene abrumador, pero muchos cambios seguramente tú ya los empezaste y, si tienes claros los pilares sobre los que se asientan, será más sencillo continuar el viaje e incluso disfrutarlo.
Primer deseo de transformación digital #1: pilar tecnológico
La Transformación Digital implica el uso de tecnologías digitales para rehacer un proceso con el fin de que sea más eficiente o efectivo. La idea es usar la tecnología no solo para replicar un servicio existente en forma digital, sino usar la tecnología para transformar ese servicio en algo significativamente mejor.
La Transformación Digital puede involucrar muchas tecnologías diferentes, pero los temas más candentes en este momento son la computación en la Nube, el Internet de las cosas (IoT), Big Data e Inteligencia Artificial.
Si deseas escalar el conocimiento que tienes sobre tus clientes y empleados, y replicarlo en una gran organización y en situaciones mucho más complejas e impredecibles, necesitas tener datos: registros ampliamente accesibles y recuperables de interacciones con consumidores y colaboradores.
Aquí es donde la tecnología puede tener el mayor impacto: en el proceso de capturar o crear registros digitales de personas (por ejemplo, qué hacen, quiénes son, qué prefieren, etc.). A esto lo llamamos “digitalización”, o el proceso de datificación del comportamiento humano, traduciéndolo en señales estandarizadas. Es útil recordar esto, porque los beneficios reales de la tecnología no son cifras, sino capturar datos valiosos que hacen que un consumidor desista o sea leal a la marca.
Segundo deseo de la transformación digital #2: pilar estratégico
Sin embargo, no se trata solo de la tecnología. La capacidad de reimaginar digitalmente el negocio está determinada por una estrategia digital clara respaldada por líderes que fomentan una cultura capaz de cambiar e inventar lo nuevo
En el corazón de la transformación se encuentran la visión (dónde quieres llegar) y la estrategia (cómo lograrlo). La visión debe ser clara, comprensible e identificable, respaldada por un plan sólido para alcanzar el objetivo. Esto marcará la diferencia para tu empresa desde el principio. Muchos líderes se enfocan en crear una visión, pero se desmoronan cuando llega el momento de ejecutarla.
Para desarrollar y ejecutar una visión y una estrategia exitosas, debes hacerte ciertas preguntas desde el principio: ¿a dónde queremos ir? ¿Qué tan listos estamos para ir allí? ¿Qué tiene que pasar para llegar allí? ¿Cómo medimos y gestionamos el viaje? ¿Cuál es el papel que juega la tecnología en la estrategia? ¿Cómo gobernamos los procesos?
Tercer deseo de transformación digital #3: Pilar capacitador
La Corporación Financiera de Desarrollo (COFIDE) se refiere a la capacitación laboral como una necesidad del trabajador para adquirir competencias y habilidades que le faciliten la adaptación a los cambios en el trabajo, y esto es más que necesario en el mundo digital que vivimos actualmente.
La importancia de la capacitación para digitalizar tu negocio reside en contar con un personal capaz de responder oportunamente a cualquier estrategia de digitalización, como el análisis de datos para gestionar la información que se genera en cada interacción digital o administrar el uso de redes sociales que permiten una comunicación directa entre el consumidor y las empresas, así como la administración del comercio electrónico, el financiamiento de proyectos de una empresa para recaudar dinero a través de internet, etc.
Considerar la capacitación como inversión y no como gasto, trae como resultado el aumento de las habilidades de los trabajadores y la competitividad de la empresa, así como su productividad y rentabilidad, entre otros beneficios.
De lo contrario, al no contar con una capacitación adecuada, el crecimiento del negocio podría verse afectado, impactando en3:
- El aumento de estrés en los empleados.
- Dificultad para establecer objetivos de calidad.
- Retrasos en el desarrollo de nuevos productos o servicios.
- Retraso en el desarrollo de nuevo hardware y software.
- Disminución en la satisfacción al cliente.
Si bien una transformación a gran escala requerirá, en última instancia, cambios de gran alcance que abarquen desde el talento hasta la infraestructura (recuerda que es algo que no se acaba), las empresas pueden obtener resultados comenzando poco a poco, aprendiendo rápido y escalando aún más rápido.
¿Cómo frotar la lámpara de la Transformación Digital?
Recuerda que la Transformación Digital no es implementar nuevas tecnologías o enfocar la transformación en una sola área del negocio; tampoco es digitalizar un producto o servicio sin ofrecer una verdadera experiencia al cliente. Para que exista una verdadera Transformación Digital, debe haber una estrategia holística que ayude a mejorar el desempeño y alcance de tu compañía.
Se trata de llevar a cabo un enfoque que considere a toda la organización en sus procesos y políticas. Con esto te aseguras de que tu negocio funciona a su máximo potencial, en vez de únicamente tener áreas fuertes o áreas débiles.
Para ello, puedes empezar por conocer el Informe de Madurez Digital del país y ubicar en dónde se encuentra tu empresa, determinar hacia dónde quieres llevarla y hacer alianzas con expertos, lo que, sin duda, hará más fácil este proceso. Pero, sobre todo, menos estresante.
Si tienes alguna duda, platica con uno de nuestros expertos y descubre cómo KIO lo hace posible al diseñar un traje a la medida de tu empresa.
1 Game Learn (2021). 7 Examples Of Successful Digital Transformation consultado febrero, 2022.
2 Deloitte (2015). Strategy, not Technology, Drives Digital Transformation consultado febrero, 2022.
3 Training Industry Magazine (2018) Business not growing? consultado febrero, 2022.
.png?width=27&height=27&name=Threads_(app).png){kind=small}
