La tecnología es crucial para ayudar a las empresas a ahorrar costos y ser más ágiles, en especial cuando nos enfrentamos a un año tan retador, como se espera que sea este 2020. Por ello, viene bien conocer las tendencias provistas por los expertos en el rubro y echar a volar la imaginación en busca de nuevos negocios u opciones que complementen tu oferta, al añadir valores agregados que contribuyan a mantener a los clientes cautivos y atraer nuevos.
En esta década veremos cumplir muchas de las promesas tecnológicas que no se habían concretado, gracias al despliegue y convergencia de la esperada red 5G, la inteligencia artificial y la consolidación de la nube distribuida.
La hiperautomatización, es decir, la combinación de aprendizaje automático múltiple (ML), software empaquetado y herramientas de automatización, constituye una de las categorías más relevantes en la lista de tendencias 2020 elaborada por la consultora Gartner1.
Por su parte, la casa analista inglesa Canalys2 observa que la próxima fase del crecimiento de la seguridad cibernética será impulsada por los requisitos del ecosistema y prevé que la inversión en este rubro superará los 44 mil millones de dólares en 2020, pues hoy las organizaciones abordan nuevas vulnerabilidades, contrarrestan las crecientes amenazas y se adhieren a regulaciones más estrictas.
Los analistas de Forrester indican que, en el caso de Edge Computing, las demandas únicas de cómputo, almacenamiento y redes para cada caso de uso impulsarán el desarrollo de factores de forma personalizados, directamente desde el nivel del procesador3.
Para Deloitte4, la tendencia de gemelos digitales5 está ganando impulso gracias a las cambiantes capacidades de simulación y modelación:
En general cosas autónomas, aumento humano, nubes distribuidas y experiencias inmersivas (que utilizan r ealidad aumentada, realidad virtual, realidad mixta, interfaces hombre-máquina multicanal y tecnologías de detección), además de blockchain, son tendencias que van a cambiar la forma en que vivimos, trabajamos y socializamos.
Recordemos que la posición de un país en el tema de innovación tiene como uno de sus parámetros el porcentaje del PIB que se destina a innovación, investigación y desarrollo, y nuestro país no pasa del 0.3% mientras que los países más desarrollados en este ámbito invierten cerca del 6%; otro indicador es el número de patentes por habitantes y también estamos muy lejos en ese índice: las primeras plazas las ocupan Israel, China y EE. UU.
Contradictoriamente, la cantidad de startups y mexicanos que ocupan lugares creativos en muchas partes del mundo es significativa, lo cual nos indica que estamos en un entorno en el que el talento existe, pero el crecimiento no se está dando con la velocidad o el gradiente para ponernos en los primeros lugares mundiales.
Para analizar el caso concreto de nuestro país, Bruno Juanes, Socio Líder para la Industria de Manufactura 4.0 en Consultoría Deloitte México, y Bernardo González, Director de Innovación de KIO Networks, hacen un análisis de las tecnologías que ya son una realidad y las que se concretarán en el mediano y largo plazo.
Bruno Juanes segmenta estas tendencias en tres partes:
Adicionales a esas tecnologías, tenemos facilitadores como la nube, blockchain, ciberseguridad y Edge Computing, entre otras.
Desde el punto de vista de Bruno Juanes, hay tres tendencias esenciales para cualquier compañía que pretenda trascender: “Nosotros les llamamos los tres mosqueteros; el cerebro, el corazón y la fuerza: IoT, IA y realidad mixta, y no funcionan solos”. Por ejemplo, IoT permite capturar los datos del mundo físico al digital, con IA se trabajan esos datos y con realidad mixta se logra darle utilidad práctica a esa información. “Esta combinación es la que tiene potencial de transformación”, señala el Socio Líder de Deloitte.
Juanes también comenta el tema de la ciberseguridad: “Ésta es indisoluble del avance tecnológico y no es factible plantear un crecimiento y utilización masiva de tecnología sin tener el concepto de seguridad cubierto en todos los frentes. En los sectores empresariales mexicanos se considera como algo aparte, pero debe estar integrada desde los activos hasta los sistemas de producción. De lo contrario, se pone en riesgo la operación del negocio”.
A nivel de usuario, Bruno Juanes aclara que la mayoría de la gente proporciona sus datos personales en una especie de “consentimiento desconocido”, al usar una plataforma digital sin tener en cuenta que esta usa para su beneficio la información proporcionada. “Compartimos de manera indirecta o por omisión nuestros datos de posicionamiento, horario y hábitos de consumo para que algunas compañías mejoren sus algoritmos y que sus ofertas comerciales nos tengan mucho mejor perfilados; si eso es el colonialismo de datos, estamos omitiendo nuestra responsabilidad en el control de la privacidad y estamos sujetos a comportamientos maliciosos de gente sin escrúpulos”, enfatiza.
“La tecnología nos debe llevar a dos cosas: mejorar la línea del ingreso o la del costo; cuando pensamos en todas estas tendencias el fin último es crear nuevos modelos de negocio que nos generen más ingresos o utilizarla para optimizar las operaciones. Se trata de poner la innovación a nuestro favor y considerarla un aliado para cabalgar entre las olas de la disrupción”, establece Bernardo González, y añade: “También es un magnífico habilitador de mayores beneficios para el cliente, ya sea para ahorrar tiempo, brindarle mayor calidad, encontrar nuevos servicios y estar en la jugada”.
En el caso de un gemelo digital, su beneficio es ser un excelente entorno de pruebas, pues se puede ver el impacto de muchas variables sin interferir en el mundo real, muy útil para implantar mejoras y obtener un aprendizaje continuo.
Al tener un equipo sensorizado e incluir big data, IA y machine learning, una fábrica puede transformarse en un ente transparente capaz de predecir sus insumos. “Así lo comprobó una farmacéutica que utilizó esta tendencia en redes sociales y pudo prever la demanda de medicamento para influencia estacional y, también, con este mismo modelo un fabricante de camiones en Asia obtuvo incidencias que lo ayudaron a mejorar sus líneas de producción”, comparte Juanes.
Otra tendencia cuyos beneficios están centrados directamente en la sociedad son las Ciudades Inteligentes, pues a través de ellas se obtienen servicios de mayor calidad. No obstante, por el momento su cobertura es limitada, pues se requiere la consolidación de Edge Computing, 5G e infraestructura de red. Con todo, los esfuerzos realizados hasta ahora han integrado la digitalización en distintos trámites y la interoperabilidad entre administración tributaria, de justicia y sanidad.
La IA, por su parte, va a ayudar a crear empleos en México de manera importante, aunque no a corto plazo. “Es cierto que cuando esté ampliamente difundida, sea accesible, barata o de uso general, sí podrá producir un cambio importante no solo en el empleo sino en la sociedad, pero será a muy largo plazo”, explica Juanes, y puntualiza: “Me gusta pensar que la IA y la tecnología en general están aquí para ayudarnos y no para desplazarnos”.
“En 2010 se creó el primer zettabyte de datos, eso equivale a 135 millones de años de video en alta definición. En el 2020 vamos a pasar de 1 a 44 zettabytes y en 2022 van a ser 88 zettabytes. Si no hay nubes, 5G o sensores, no vamos a poder capitalizar toda esa cantidad ingente de datos, que es riqueza para transformar nuestro modelo de negocio u optimizar la operación”:
Bruno Juanes
Socio Líder para la Industria de Manufactura 4.0
Deloitte México
Cualquier compañía que necesite velocidad y volumen en el manejo de sus datos, va a encontrar en 5G un aliado, ya sea una fábrica, banco, retail o un automóvil, pues combinada con IA, nube y salidas digitales en forma de realidad aumentada o virtual, será la pieza clave para transformar realmente los negocios y hacer posible que conceptos como las Ciudades Inteligentes sean reales.
Sin embargo, primero habrá que resolver muchas cosas, sobre todo en cuestión de costos: tener antenas pequeñas a no más de trescientos metros para garantizar la comunicación implica una inversión multimillonaria que no todos los gobiernos, ciudades o empresas están dispuestos a realizar a cambio de tener esos beneficios de velocidad y volumen.
En voz de Bruno Juanes, quien piense que la nube está en declive se encuentra completamente equivocado: “Hoy el siguiente paso son las nubes distribuidas y no necesariamente de almacenamiento en un lugar, sino habilitando conceptos como la niebla que, combinada con Edge Computing, dan potencia de cómputo y almacenamiento en el lugar de utilización, no importa si es en un sensor o al habilitar la comunicación máquina a máquina”, explica.
La nube es indisociable del progreso empresarial: para que una empresa disponga de sus servicios informáticos y datos de IA en tiempo real en cualquier localidad del mundo, la única manera es a través de la nube.
Entre empresas mexicanas es el gran desconocido, con sus honrosas excepciones. Particularmente, Juanes recomienda a sus clientes de manufactura mejorar y optimizar con blockchain cualquier transacción de comercio exterior. “No les pido que se vuelvan expertos: les digo que sean muy prácticos y consideren en qué casos de uso específicos blockchain va a ser un diferenciador para su tipo de negocio”, enfatiza.
También considera que, si pudiéramos tener una base instalada de casos de uso de empresas que ya están utilizando blockchain de manera cotidiana para sus transacciones de exportación, daríamos un paso gigante para luego explorar la utilización de esta herramienta en otros ambientes, como contabilidad, auditoría o transacciones bancarias, que ya son un poco más sofisticadas.
Cuando los conceptos de tecnología mencionados se desplieguen a su máximo potencial, obtendremos avances significativos en todos los terrenos del conocimiento y actividad humana, ya sean profesionales o personales, dando paso a un mundo empresarial más real y totalmente nuevo.
Al combinar IoT con una nube sólida, IA potente y 5G (integrando además robots o gemelos digitales y realidad aumentada o virtual), se transformará intrínsecamente la manera en que se hacen negocios e, incluso, la forma en la que nos relacionamos entre humanos y con distintos tipos de máquinas.
“El futuro va a ser completamente retador, disruptivo, y no va a parecerse en nada a lo que conocemos en este momento. Seguramente nos va a dar tiempo de verlo, aunque serán nuestros hijos quienes lo vivirán en primera persona”, augura Bruno Juanes.
Por su parte Bernardo González concluye que, lo que promete esta década que está comenzando, es una gran transformación: “La tecnología es más accesible y de lo que se trata es de hacer proyecciones lo más reales posibles, ponderar ventajas y viabilidad, hacer un plan de implementación y desarrollo en el corto, mediano y largo plazo, con la posibilidad de incluir algunos pilotos o proyectos modelados en la nube, lo que te permitirá tener costos aceptables”.
Fuente:
KIO Networks. (2020). Webinar 2020: una odisea tecnológica.
1. Gartner. (2019). Gartner Identifies the Top 10 Strategic Technology Trends for 2020.
2. Canalys, (2020). Canalys 2020 trends and beyond – Part 1.
3. Forrester. (2019). Predictions 2020: Edge Computing Makes The Leap.
4. Deloitte. (2020). Tech trends 2020.
5. Gemelos digitales: objetos físicos que contienen una serie de sensores que elaboran una imagen digital del funcionamiento de su versión física.